Las comarcas de El Paso, Mazo y Fuencaliente se elevan hasta la cordillera dorsal de Cumbre Vieja. Aquí el paisaje áspero se ha ido formando por erupciones.
Los volcanes de Martín (1646), San Antonio (1677), El Charco (1712), San Juan (1949) y Teneguía (1971) han creado vastos campos de lava donde las estaciones pasan sin apenas dejar huellas. Este sobrecogedor paraje es paradójicamente el más joven de la Isla; colonias de vegetales se instalan lentamente sobre el estéril terreno, también habitado por saltamontes, escarabajos y lagartos.